La euforia que expresaron los ambientalistas por el reciente hallazgo, en los Andes colombianos, de dos colonias de Baudo Oropendualo, un ave declarada en amenaza de extinción, fue similar a la que, en diciembre del 2007, suscitó entre los inversionistas mineros el anuncio del yacimiento La Colosa, en el departamento del Tolima, catalogado como una de las diez minas de oro más grandes del planeta.
Este país de 44 millones de habitantes, el único de Sudamérica con costas sobre el Atlántico y el Pacífico, en cuyo territorio la cordillera andina se abre en tres ramales, se debate entre sus riquezas ambiental y minera.