BOLETIN DE NOTICIAS de MOVIDA AMBIENTAL

30/5/10
OPINION
La vida es la vida desde hace cientos de años. Cientos de años han sido suficientes para que el hombre se crea que es quien crea y quienes creen en las creaciones del hombre, creen también en los milagros de ellas.
Cada avance tecnológico es el nacimiento de un nuevo mesías que llega al mundo coronado por sus mismos fieles, pero a veces, los fieles, piden más y mas del mesías que se ve obligado a evolucionar, entonces tiene que engendrar a un nuevo elegido que es mejor que él.
Así los avances tecnológicos se venden y venden la vida perfecta, hasta que la evolución mesiánica sigue su rumbo ya sin lugar a que los fieles pudieran cansarse de sus enviados.
Pero para los fieles consumidores es mejor servir al más evolucionado que al que ha quedado atrás en la evolución.
En constante movimiento, el hombre envía productos con el fin de fomentar el consumo de los fieles compradores y ellos compran por más de que sigan creyendo que el antecesor era bueno.
La vida es la vida desde hace siglos, pero la vida dentro de siglos no va a ser la vida de antes.
El avance de la tecnología con el fin consumista, consume los recursos que no son renovables.
La producción en constante aumento para satisfacer la demanda del mercado, que vende antes de tener, a los que tienen dinero para comprar, está logrando que el planeta entero, que es patrimonio de todos(los que tienen y los que no tienen dinero) hoy sea de los que con su moneda, no solo compran tecnología, sino también, el planeta.
Se va vendiendo de a poco la muerte del planeta.
Se va comprando de a poco la vida del planeta.
El consumidor poco entiende, porque poco le han enseñado, que la tecnología progresiva en masa no nace en los comercios, en las casas de electrodomésticos, en supermercados, sino, sale de una superproducción devastadora de la tierra y de la mano de obra que a produce.
Una empresa de teléfonos o de televisores, para entrar y seguir en el mercado necesita conseguir permanentemente mano de obra y materia prima barata, para que sus productos sean baratos y legue a manos de mas personas, lo cual significa que mano de obra barata sea hambre y sumisión para el trabajador y materia prima barata se traduce en decenas de empresas proveedoras de insumos que a su vez tienen que ser baratas para que el cliente los contrate, entonces la cadena sigue y sigue hasta que llegamos, donde la materia prima se consigue, que es, la tierra.
A la tierra nadie le paga, pues no cobra ni cobraría.
Todo lo usado contiene productos de la minería. Las empresas mineras entran en un país con más facilidades que los ciudadanos, escondidas en corporaciones, roban, saquean, recursos naturales para abastecer el mercado consumista, mientas la tierra cada vez más seca y agujereada.
Muchos compran lo último para vivir una vida más cómoda y darle lo mejor a sus hijos, sin pensar que comprar lo último es comprar un futuro peor para sus hijos.
Con cada compra sin ser necesaria, se acelera la destrucción de la tierra, se acorta la vida de nuestra descendencia, se ayuda a que las empresas sigan actuando impunemente.
Donde se instala una minería, se desinstala un pueblo. Las tierras natales de los lugareños ya nos les pertenece, pues obligados por la contaminación y la ausencia de agua, por ser absorbidas por la minería, deben venderlas por monedas y quienes se resisten, terminan paleados por el poder, porque el poder siempre defiende lo indefendible.
El consumo excesivo hace que se forme parte de todas las injusticias alrededor del mundo, pues la economía, no conoce fronteras y las muertes por represiones en manifestaciones antiglobalizadoras, siempre son muertes impunes, son impunes porque nunca van presos todos los responsables, pues los responsables son todos los consumidores.
Quien ve la felicidad en un objeto, tendría que reflejarla en el futuro ¿Qué va a comprar cuando no haya nada por comprar? ¿Cómo encontrará la felicidad?
Adelantemos el futuro, sin tener que llegar al punto limite de no tener nada que comprar y busquemos la felicidad hoy, sin nada en las manos pero con todo en el mundo, en su lugar, para que la vida continúe, para hacerles el mejor regalo a nuestros hijos, la tierra.
http://pensamientosdelfantasma.blogspot.com/2010/05/consumo-la-vida.html