MALDITOS
Una BANDA que causa FURIA: Los BARRICKTURROS
La debacle de la economía mundial, parece haber puesto al mundo al borde un abismo insondable con consecuencias imprevisibles e impredecibles, y cuya duración y fin pocos podrían pronosticar.
El enloquecimiento de las variables y las otroras certezas económicas, de la mano de operaciones comerciales y financieras especulativas, han puesto en jaque, a las denominadas por algunos con justicia, “dictaduras del mercado”, maquilladas de larga data bajo la forma de democracias formales o liberales.
Democracias, que desde la década del noventa se han postrado ante el Dios Mercado en sus templos (los shopping) y han aplicado a rajatablas recetas de ajustes permanentes, desguace del Estado y sus organismos de control, privatización de empresas públicas y transferencia de los recursos naturales y estratégicos a manos de las corporaciones.
El boom del crecimiento ilimitado, las ganancias obscenas y el consumismo irresponsable e individualista comienza a desvanecerse en el aire cual pompas de jabón.
El Titanic empieza a hundirse, pero la orquesta se empeña en seguir tocando la misma melodía y el capitán cree que el buque tiene salvación y reparte salvavidas para la primera clase y deja librada a su suerte a los de segunda y tercera.
En dicha sintonía, los gobiernos desorientados y a través de operaciones de rescate monetarista y fiscales tratan de preservar a los irresponsables que causaron la hecatombe, sin importarles que el trabajo, los ahorros y el sacrificio de los que menos tienen se inmolen en el aquelarre de la timba especulativa mundial.
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