BOLETIN DE NOTICIAS de MOVIDA AMBIENTAL

REPRIMEN A POBLADORES QUE SE OPONEN A SU INSTALACIÓN

Agua Rica será tres veces más grande que Bajo La Alumbrera y también estará administrada por capitales canadienses. Vecinos fueron corridos con gases.

Casa de Catamarca. Organizaciones ambientalistas denunciaron ayer la represión que tuvo un saldo de 30 heridos. La Justicia suspendió las obras tras el incidente.

“Las generaciones futuras tienen derecho a heredar la tierra en condiciones habitables”. Desdibujada detrás del humo de los gases lacrimógenos, la frase estampada sobre la bandera de los vecinos de Andalgalá, en la provincia de Catamarca, parecía perder sentido. Eran las 17.30 del lunes y ese paraje de alta montaña cercano al nevado de Aconquija se había convertido en el escenario de un choque desigual: a los embates de una fuerza de seguridad denominada Kuntur (Cóndor en quechua) resistían sin éxito los integrantes de la asamblea popular del Algarrobo, que desde diciembre acampa sobre la ruta para impedir lo que se proyecta como una explotación minera nociva y flagrante. El saldo de más de treinta detenidos y un número no precisado de heridos es insuficiente para ilustrar la gravedad de los hechos de Agua Rica, el emprendimiento de la controversia.

Según anuncia en su web, se trata de un yacimiento de cobre, molibdeno y oro que empezó a construirse en el segundo semestre de 2009 y comenzará a producir, de acuerdo con el plan corporativo, recién en el año 2012. La empresa canadiense Yamana Gold Inc. es propietaria del 100% de las acciones de Agua Rica, tres veces más grande que el faraónico Bajo La Alumbrera, también en Catamarca.